Azteca Noticias realiza recorrido en embarcación sargacera
El equipo de Azteca Noticias estuvo a bordo de nuestra embarcación recolectora de sargazo para ser testigo de la cantidad de sargazo que puede recolectar por hora.
El arribo de sargazo a las costas es un fenómeno, según los expertos, provocado por el hombre a través de la utilización de fertilizantes ricos en nutrientes que van a parar a los océanos, afectando así a decenas de destinos turísticos del Mar Caribe y Atlántico.
Puerto Morelos, es uno de los lugares que más se ha visto afectado por los recales de sargazo, por lo que las autoridades están enfrentando esta contigencia con recursos propios y con el ingenio de su misma gente.
La embarcación tipo catamarán de cuatro y medio metros de manga por nueve de eslora, se adentra con el equipo quienes se cubren los rostros para protegerse del sol y comenzar una nueva jornada.
Mediante un dron se localizan las manchas de sargazo y en cuestión de minutos se llega al objetivo a unos 200 o 300 metros de la playa. En ese momento se enciende la banda de acero inoxidable que comienza a recoger el alga, algo así como ir pastoreando el sargazo.
“Hay que saber cómo pegarte al sargazo, cómo lo vas a subir porque tienes que estar contra la corriente y el viento; el sargazo solito se acomoda, se junta, a veces está en forma redonda o alargada, nunca hay una posición exacta para subirlo, pero nos la tenemos que ingeniar”, señaló Fernando Fernández, capitán de la embarcación.
El sargazo cae de la banda hacia un contenedor en cuyo fondo hay una enorme bolsa de gran resistencia.
“Enbolsamos aproximadamente 1.4 metros cúbicos de sargazo en cada una de ellas y las podemos botar directamente al mar ya que son flotantes y otra embarcación puede jalar hasta 5 o 6 bolsas a la orilla, o bien, hacemos maniobras de traspaso de carga, de la catamarán a embarcaciones menores y de esta forma damos empleo en la zona de Puerto Morelos”, mencionó el empresario David Jáuregui.
Pero esa es sólo una parte del proceso para controlar el sargazo en Puerto Morelos, la otra muy importante es la colocación de vallas en puntos estratégicos frente a la costa.
“Las barreras van adquiriendo una forma de semicírculo donde van a tener una entrada norte y una entrada sur, dependiendo de cómo venga el sargazo, si viene del sur o viene del norte, vamos a poder cerrar esas entradas sin cerrarle la entrada a las embarcaciones”, informó Luis Cardeña, encargado del proyecto.
Las vallas de color azul son fabricadas en Puerto Morelos con tecnología local. Están hechas de plástico, rellenas de poliuretano, son completamente flotables y tienen aproximadamente 40 cm por encima del nivel del agua y un faldón de aproximadamente de 60 cm por debajo del mar, esto da un nivel de contención del 70%, hay un 30% del sargazo que sí logra brincar de estas vallas. Todas están unidas unas con otras por cables de acero sumamente resistentes y, esto lo colocamos a línea de costa en puntos estratégicos para evitar que el sargazo pase y, también direccionarlo en áreas específicas para lograr acumularlo y poder hacer una mejor recolección.
Cabe señalar que por cada 400 metros de playa, se destinan 15 o 20 metros como área de sacrificio para direccionar el sargazo mediante las vallas y una vez acumulado, facilitar su recolección.
“Tenemos un área de sacrificio de 20 metros, pero después de esos 20 metros se ve una playa totalmente limpia, una playa en la que ya no hay arribo de sargazo”, mencionó Luis Cardeña.
A través de toda esta metodología, los responsables del proyecto en Puerto Morelos hemos logrado frenar en buena medida el arribo de sargazo, con barreras de contención, con la embarcación que lo recolecta que nosotros mismos hemos desarrollado en los últimos meses.
Agradecemos al equipo de Azteca Noticias, José Martín Sámano, Oscar Navarro y Alberto Gordillo, por este reportaje.